Erección permanente y dolorosa del miembro viril, sin deseo sexual. El mal es provocado por un trastorno vascular que afecta los mecanismos de la erección: el pene no logra evacuar la sangre que lo llena y se mantiene rígido, incluso después de apagado el deseo. Luego de más de cuatro horas de erección continua, se recomienda abrir quirúrgicamente los cuerpos cavernosos y drenar la sangre estancada, para evitar la gangrena.
La palabra proviene del griego priapismós, que tiene el mismo significado, y deriva del nombre de Príapos (Príapo), el dios de la fertilidad vegetal y animal, hijo de Afrodita y Dionisos, representado con un falo enorme, venerado inicialmente en la región del Helesponto.
Según el mito griego, el priapismo era un castigo de los dioses: Pegaso, embajador de Dionisos, partió de su ciudad, Eleuteras, hacia Atenas, llevando una estatua del dios del vino, pero al llegar a destino fue rechazado con furia por los atenienses y tuvo que emprender el regreso . En represalia,... Continuar leyendo |